Yo empecé a trabajar en FON el 9 de enero de 2006 y dos días más tarde entró un barbudo medio hippie. Le pregunté cómo se llamaba y resultó que tenía el mismo nombre que otro en la empresa. En aquellos tiempos solo éramos unas ocho personas habitando el mismo espacio pequeño. Así yo le dije que era imposible tener dos personas con el mismo nombre y le pregunté el apellido, como alternativo. Cuando dijo “Bergantiños”, le dije que imposible. Too difficult. Esperé dos segundos y le bauticé “Berga” .
Desde aquel día, se convirtió en Berga y ha sido conocido por toda la empresa así. Y desde entonces, yo le he visto cinco días a la semana, todas las semanas durante el último año y medio (y alguna noche con sus gafes de sol). No solo ha sido el primer RastaFonero oficial, sino también ha sido mi mejor amigo en este viaje curioso que llamamos FON. Cada vez que se me ocurría alguna de mis ideas absurdas, ahí estaba el Berga para hacerme el diseño, como con el MoFoNero. Y ha estado conmigo compartiendo teorías profundas desde cosas tan complejas como los coquitos a como hacer mejores jugadas en las Jornadas de Fútbol.
Ahora que se embarca en una nueva aventura, tampoco estoy demasiado preocupado. Tenemos a Hysidro con un conejo WiFi llamado Bergins, y siempre quedarán los encuentros por la Calle de Palma y los episodios de Galicia Vice. Y cuando por fin hagamos la última gran fiesta de FON algún día, vendrá Berga seguro porque ha sido uno de los grandes artífices de todo esto que hemos creado. Berga Forever!
La imagen es creación de Hysidro.