Mi niña se ha graduado

Mi querida Laurita se ha graduado esta mañana de fisioterapia. Yo la conocí hace ya unos años cuando ella estaba terminando la carrera de educación física, pero ahora ya es fisio también (es un partidazo la niña). No me lo puedo creer. Hoy acudí a su graduación con sus padres, Juande e Ignacia, junto con mi deportista favorita, la Rose Superstar. Cuando íbamos todos juntos en el coche hacia la función, sentí que nosotros cinco eramos una familia yendo de vacaciones juntos. La verdad es que los padres de Laura los conozco más por hablar con ellos por teléfono que de verles en persona y sin embargo es como si los conociera toda mi vida. Siendo lo cursi que soy, pensé en ese momento en la gran suerte que he tenido en mi vida de tener tan buenos amigos (más suerte que con la lotería). Después de la graduación . . .

nos fuimos todos a comer. Hace casi un mes que no veo ni a Laura ni a Rose. ¡Cuanto me gusta estar con ellas! Yo he sido alumno profesional durante muchos años y he tenido muchas graduaciones. Siempre me he quedado con ese sabor agridulce de haber hecho buenos amigos pero que después cada uno se iba por su camino diferente. Ahora no sé donde Laura buscará trabajo y aún no sabemos si Rose se renueve o no con el Estu. Es triste ver que las cosas cambian y que la gente se va. Sin embargo, una vez me dijo mi amiga Waya que daba igual donde vivías o donde te mudabas porque los amigos los mantenías siempre. Siempre están ahí en el país de la amistad. Yo lo que sé es que tanto a mi Lauria como a mi Superstar las quiero con todo mi alma.

Besos y ¡enhorabuena!

Por cierto, Juande y yo somos bastantes guapos pero hoy nos tocó pasear con tres bellezas. Eramos la envidia de toda la capital. ¡Vaya lujo!