Uno de mis poemas favoritos . . .
Vals
Yo toco el odio como pecho diurno,
yo sin cesar, de ropa en ropa vengo
durmiendo lejos.
No soy, no sirvo, no conozco a nadie,
no tengo armas de mar ni de madera,
no vivo en esta casa.
De noche y agua está mi boca llena.
La duradera luna determina
lo que no tengo.
Lo que tengo está en medio de las olas.
Un rayo de agua, un día para mí:
un fondo férreo.
No hay contramar, no hay escudo, no hay traje,
no hay especial solución insondable,
ni párpado vicioso.
Vivo de pronto y otras veces sigo.
Toco de pronto un rostro y me asesina.
No tengo tiempo.
No me busquéis entonces descorriendo
el habitual hilo salvaje o la
sangrienta enredadera.
No me llaméis: mi ocupación es ésa.
No preguntéis mi nombre ni mi estado.
Dejadme en medio de mi propia luna,
en mi terreno herido.
–Pablo Neruda

Y en el juego del poema emparejado, éste va con:
No te salves de Benedetti
No te quedes inmóvil
al borde del camino
no congeles el júbilo
no quieras con desgana
no te salves ahora
ni nunca
no te salves
no te llenes de calma
no reserves del mundo
sólo un rincón tranquilo
……
No te preocupes, no toco odio y estoy tan fuera de forma física que jamás me pasaría durmiendo lejos de casa sin ropa y no tengo fuerza para hacer nada sin cesar (menos hablar por teléfono), cosa que descubrí en Formentera que era mejor estar en la playa totalmente vestido. Además mi terreno no está herido, está simplemente un poco cansado. Y sí, quizás necesito solamente un rincón tranquilo.